Así se valida un electrolizador antes de instalarlo: guía completa de una FAT bien hecha
Una FAT (Factory Acceptance Test) es la prueba definitiva antes de que un sistema de electrólisis salga de fábrica. Es una validación integral del rendimiento, seguridad, flexibilidad operativa, pureza del hidrógeno y fiabilidad. Se realiza en condiciones controladas, registrando parámetros críticos, preferiblemente en presencia de testigos del cliente. Permite detectar fallos antes de transportar el equipo al emplazamiento definitivo, evitando costes y retrasos en el proyecto. Te contamos más en este artículo.